TUXTLA GUTIERREZ, Chiapas, 08 de Agosto de 2016./Cosme Vázquez/ASICh.- Un ataque con balines llamadas “balas frías”, que avientan con resorteras, así como con palos y lanzacohetones realizaron profesores de la CNTE en conocido hotel de Tuxtla Gutiérrez, en donde se realizaba en esos momentos el encuentro con representantes sindicales y directores de escuelas, convocados por la Sección 40 del SNTE.
Alrededor de 600 docentes se reunieron este lunes, en un marco de respeto e institucionalidad, para analizar diversos temas pedagógicos de interés para el magisterio, pero minutos antes de terminar, un grupo de aproximadamente 30 integrantes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), armados con palos, lanza cohetes y resorteras, irrumpió con lujo de violencia.
Dada la alerta por parte de la vigilancia interna del hotel, los participantes del encuentro fueron resguardados en otra área, para no caer en la confrontación, por lo que los agresivos profesores en resistencia a la ley general de educación y sus leyes secundarias llegaron y destrozaron las tazas, vasos y platos donde se había servido el café y agua, dejando como elemento de prueba de sus hechos las “balas frías” que dispararon.
No queda duda, que ante la impotencia de ver cómo termina un movimiento condenado al fracaso desde sus inicios, a la dirigencia del magisterio disidente no le queda más que ofender y violentar los derechos de verdaderos maestros preocupados con su profesionalización y actualización permanente, sostuvieron varios de los que se vieron en riesgo.
Ojalá que las autoridades tomen cartas en el asunto, frene las agresiones y evite la confrontación entre maestros, puesto que este hecho, lamentablemente tiene mucho por dónde dar, anotaron.
Pidieron no dejar desapercibido lo ocurrido este lunes cuando maestros de profesión se reunieron para construir espacios de información y reflexión sobre el nuevo modelo educativo y un minúsculo grupo impuso la violencia sobre la ley y los derechos de todas y todos los ahí reunidos. ASICh.