09 Mayo 2018
Manuel Zepeda Ramos
¡Y enmudeció el Palenque! Hubiera dicho el extraordinario compositor vernáculo Tomás Méndez la noche del 7 de Mayo -si viviera y lo hubiera presenciado-, como tantas veces recordó esa frase de su canción “Muerte de un gallero” -él y sus intérpretes-, cantándola en sus presentaciones en plazas y teatros de México y el extranjero, ahora que se llevó a cabo el segundo programa del recién resucitado programa, Tercer Grado, en estos días intensos de campañas electorales.
Tocó a José Antonio Meade Kuribreña estar frente a periodistas mexicanos experimentados y muy reconocidos, en este “examen de conocimientos y habilidades” para demostrarles a propios y extraños quién habrá de ser el mejor Presidente de la República que deberá ser elegido el primer domingo de julio.
Desde el arranque -en radical diferencia con el primer invitado al programa quien re estrenó la emisión periodística nocturna y fue evidentemente consentido y cuidado-, el fuego estuvo graneado e intenso.
A Pepe Meade le preguntaron todos, de todo. Él, con su enorme experiencia y honradez acumulada a lo largo de 20 años, con una hoja de servicios impecable que le ha permitido ser Secretario del Ejecutivo en cinco ocasiones con dos presidentes de diferentes institutos políticos, respondió con cientos de datos, bien hilvanados, intensa y riquísimamente aderezados con un dechado importante de memoria acumulada. Pepe Meade es un político acostumbrado a manejar impecablemente la estadística y historia, con habilidad pasmosa.
El candidato de la coalición Todos por México, respondió cuanta pregunta le fue formulada, de manera intensa y precisa: desde los números actuales de las encuestas que no le favorecen y que si ha fracasado su modelo de candidato independiente por lo que se ha relanzado su campaña, bajar el perfil para apoyar otra candidatura que no sea la suya, que aparezca con una chamarra roja, por qué fue por el PRI y no por otro partido, que si es honesto el presidente Peña Nieto, la estafa maestra, que si la marca PRI le pesa, que si es honesto Romero Deschamps, el caso Odebrech, la honradez del Niño Verde. Todas fueron puntual y directamente respondidas, con muchos datos informativos paralelos.
Quien quiera saber más sobre esta espléndida entrevista y si tiene Facebook, puede verla completa entrando en tercer grado. Allí puede verla completa.
Hubo una pregunta que me despertó un gran interés porque la respuesta tuvo que ver con el futuro del desarrollo del sureste de México, ese México, si no olvidado, sí tratado de manera desigual. La pregunta iba en torno a la diferencia existente entre Pepe Meade y Peña Nieto; en qué sería distinto:
Pepe Meade habló acerca de la importancia de cerrar brechas. México tiene, dice Meade, tiene la gran necesidad de cerrar tres brechas. La primera, enorme brecha, tiene que ver con el desarrollo del norte y con el sur de México. La segunda brecha tiene que ver con la diferencia entre el hombre y la mujer. Y la tercera brecha, fundamental, entre el mexicano que tiene y el que no tiene.
Para cerrar la primera, es necesario bajar gas al sur de México, vía Coatzacoalcos y Salina Cruz para llegar a Chiapas. El despegue económico de Nuevo León se dio cuando pudo incorporar gas a su desarrollo industrial. El día que Chiapas tenga gas, estaremos en la antesala de poder industrializar a Centroamérica que hoy produce energía hidráulica 30% más cara, con una población similar a la de Canadá, pero que crece muy rápido. Estaríamos pensando, argumenta, en la enorme importancia de transformar solidariamente el desarrollo de esa parte del continente, de la mano con nuestro país en el desarrollo del proyecto de Puerto Madero y el desarrollo agro industrial de Chiapas. Además -digo yo-, sería el momento oportuno para desarrollar un proyecto cultural de la Frontera Sur en donde participarían los estados del sureste con los países centroamericanos, lo que nos daría la gran oportunidad de recuperar pasados históricos y culturales que nos daría una gran renovación que a todos nos conviene.
La segunda brecha tiene que ver con la desigualdad de los hombres y mujeres en donde las guarderías y las escuelas de tiempo completo, la igualdad salarial de la mujeres por su conocimiento igualitariamente adquirido, la incorporación de hombres y mujeres al ciclo preparatorio, son temas importantes contemplados en Avanzar Contigo.
La tercera brecha está entre el mexicano que tiene y el que no tiene. En el Mexico de hoy hay 12 millones de mexicanos que queman leña para calentarse y para hacer su comida, el México de los jornaleros es dramático y la distancia es tan grande que ni siquiera pensamos, dice Meade, que es normal no darle servicios a los jornaleros: es un México que se tiene que acabar.
Debemos cerrar, dice contundente Pepe Meade, estas tres brechas y será la siguiente administración la que deberá hacerlo.
Lo macro es importante, porque nos da recursos para poder hacer lo micro, que es desterrar para siempre el que todavía haya mexicanos que quemen leña para poder vivir, que todos los niños y las niñas de México vayan a la escuela, que nadie se levante en México preocupado por cómo alimentarse él y su familia.
El acento de la próxima administración, subraya el candidato, está en la inclusión y el cerrar estas distancias que son incompatibles con el México que podemos tener.
Lo que está en juego en México no es un modelo, dice Pepe Meade: es su viabilidad hacia adelante. Y dijo más:
No nos vayamos a equivocar. No le vayamos a apostar por alguien que quiere cerrar el modelo educativo que pretende que den clases a nuestros hijos los mejores maestros de México, que quiere regresar al precio de garantía, que quiere suspender la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México. En esta elección está en juego la confianza por invertir en nuestro territorio.
La gente que está dispuesta a jugársela por el país, concluyó, es la gente que ve esperanza de que recuperemos la seguridad.
Ciertamente, enmudeció el Palenque.
Pepe Meade representa hoy el futuro contra al pasado. Representa confianza ante el riesgo. Los señores periodistas tuvieron frente a ellos a un mexicano que sabe, que se las sabe todas y que está dispuesto a dar todo por el futuro nacional, por el futuro de nuestros hijos. No me cabe la menor duda que los periodistas reconocieron su talento, su conocimiento, su vocación, su honradez y su gran amor a México.
Enmudeció el Palenque. Pepe Meade los convenció con argumentos contundentes, insoslayables. Pepe Meade los venció con su arrollador conocimiento de Mexico.
José Antonio Meade debe ser el próximo presidente de México.