COMENTANDO LA NOTICIA

17 Junio 2015.

Alfonso Carbonell Chávez

¡Dios nos coja confesados!

Sí y va de nuez; miles de spots insulsos, vacíos llenos de lugares comunes nos esperan en esta nueva reyerta electoral pero ahora solo  en el estricto orden local y las que, al menos teóricamente, habremos de elegir democráticamente a integrantes de los 122 ayuntamientos y 41 diputados al congreso local (24 de mayoría, 16 plurinominales y el diputado migrante). Con suplencias y toda la cosa. Así pues,  prepárense a ver una más de las encarnizadas luchas de poder por el poder mismo. La excepción solo confirmaría la regla. Y no es que me sitúe de entrada en un plano pesimista pero por lo hasta ahora visto (recuérdese que ya hubo una época de precampañas y otras más de plano anticipadas ¿o no INE y IEPC?) lo que se decanta en más de lo mismo. Sin duda hay en el concierto general de candidatos, hombres y mujeres de gran valía de trabajo y compromiso que por sí mismos garantizan más certeza que los propios colores que abanderan. Y digo colores incluso siglas porque a como están las cosas, en Chiapas y el país, deniéguemelo si no (dixit Arcadio Acevedo), sobre las ideologías pus ¡ya ni hablamos! El planteamiento ese sí general que podemos hacernos es, pareciera simple la respuesta empero lo invito a reflexionarla; ¿para qué quieren las y los actuales contendientes alcanzar ya bien la presidencia o una localuca? Si logran “desfacer el entuerto”, empezaremos como sociedad a entender el porqué de tan baja calidad en las propuestas y por ende de los proponentes. Insisto, no generalizo. No se esponjen.

Lo más fácil en este tema de aspirar y lograr, primero, la candidatura y después lanzarse a la conquista de los votos claro está previas campañas, es exactamente para lo mismo que ayer y las históricas elecciones hemos visto, sufrido y constatado. Cambiar de carro, de casa y de esposa. ¡Jummm! Pero miren ustedes amables lectores; si anda, grazna y camina como pato… seguro lo es. Me explico, hay quienes plumajes como los del poeta Díaz Mirón dicen poseer de esos “que cruzan el pantano y no se manchan”, habría que verles el “testuz” (decía mi abuela Eda) para conocer sino de lodo o algo más fétido están bien sobrados. Porque yo he dicho y lo sostengo una vez más, que los ciudadanos tenemos el deber moral más allá de tremores patrióticos locales, de heredarles a nuestros hijos y los hijos de éstos una cultura democrática que rompa las cadenas de la indignidad en el gran “Parián” (mercado colonial en México) de la compra venta del voto.

¡Dios nos coja… II

Más claro y pelado; no es de hoy ni tampoco invento de mercaderes cualesquiera sino de perfectos amos de la imagen y las finanzas quienes marcan el ritmo, sino y destino de las campañas. Se plantean casi siempre en su cálculo perverso, cuántos, dónde y tal vez algunos porqués de su vida mísera que concentra todos los agravios habidos y por haber. Saben ¡claro qué saben!, tienen la cifras y las mediciones incluso oficiales para saber de qué tamaño es la torta y el refresco que pueda saciar al menos ese día de mitin su acumulada hambre. Solo la del estómago porque la del espíritu… no la podrían satisfacer ¡nunca! Y lo saben. Así cuando empieza la fiesta del reparto de gorras y playeras y despensas que saciarán las próximas 48 horas su necesidad de necesitado cuyo contenido proteínico y calorífico se resume en un medio kilo de frijol con gorgojos, arroz vietnamita de 6 pesos kilo, un medio litro de aceite patrona, una lata de atún y su galleta de animalito, en ese solo y simple hecho la verdad, es como mentarles la madre a las y los chiapanecos sobre todo a los más jodidos. Huele mal y ¡duele más! Me cae.

Pero no, no es el caso quedarse en esta espiral del tiempo mascullando derrotas pasadas y bíblicas sentencias como aquella de ¡¨se los dije! Je. No, no es suficiente. Lo que sí y de eso trata el convulso entuerto que me planteo y les comparto, sobre de que ¡algo tenemos que hacer y pronto todos!; y ayer ya era tarde. Tenemos la oportunidad que se basa en el derecho constitucional de votar, de empezar a escudriñas lo más posible a las y los que ahora con un halo de santidad y compromiso con las mejores causas de los pobres y los más pobres entre tantos, insisto de considerar de dónde vienen, qué han hecho, cómo lo han hecho, qué es lo que tienen y cuánto importa (en pesos y centavos); cuántas casitas blancas tienen etc., etc. Y aun así pregúntele al vecino y cuénteselo a la persona que más confianza le tenga para luego no vaya a llamarse a sorpresa. Me queda claro.

¡Qué Dios nos coja… III

Así pues, una vez más y otra vez como dice el filósofo guanajuatense José Alfredo Jiménez; otra vez a brindar con extraños y a llorar por los mismos dolores”. Porque así es, en efecto; en este realmente pequeño trayecto de campañas en nuestra entidad, algunos 30 días otros solo 15, o como coloquialmente diríamos que “de acuerdo al sapo es la pedrada”, veremos deambular, nosotros los capitalinos en Tuxtla ustedes mis queridos paisanos en el municipio y distrito que corresponda, algunos tocar puertas para platicarles sus cuitas y acaso sus propuestas. Otros más en faustuosos mítines multitudinarios con comida y bebidas que algún queda bien dará para mañana cobrar facturas y, en fin, verbenas populares, abrazos, besos y guirnaldas (no de oliva je) y todo bajo los acordes de un corrido musicalizado  que pondere hechos y virtudes del candidato en cuestión. Costumbres viejas costumbres decía y cantaba el poeta Serrat. Empezamos ¡otro uno! Así pues ¡qué dios nos coja confesados! Nos quede claro.

Ya de salida

Fernando Castellanos, Enoc Hernández, Carlos Esquinca, Mario Guillén, Carlos Penagos, Willy Ochoa, Juan Aquino, Guadalupe Ruiz, Paco Rojas, Alfredo Araujo. Astrid Pastrana, Alejandra Peralta, Neftalí del Toro, Marco Cancino, Rafael Jiménez, Ancheyta Bringas, Rubén Peñaloza,..// Miren de los anteriormente enlistados, solo para el ejercicio, son candidatos y candidatas a  presidencias municipales y otros más a diputaciones. Así, se trata de adivinar o poner a prueba sus conocimientos para que ustedes, amabilísimos lectores, contesten quién es quién y para qué está jugando; de qué municipio y distrito. Si usted responde acertadamente la mitad más uno ¡felicidades ya ganó! O igual ¡ya perdió! ¡Suerte!..// ¡Me queda claro!

P.D.- Esta muestra equivale al 1.0 del total de candidatos.  (Apróx.)