+ El Gobernador asistió al Homenaje Póstumo del escritor chiapaneco
+ Junto a familiares y amigos le dieron el último adiós a don Laco
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chiapas, 17 de Septiembre de 2015.- Tras manifestar la tristeza y el dolor que causa el fallecimiento del escritor Eraclio Zepeda Ramos, el gobernador Manuel Velasco Coello destacó que con sus fuertes raíces, profundas en su tierra, don Laco se convirtió, como solo los grandes hombres pueden hacerlo, en un ciudadano del mundo.
Durante el Homenaje Póstumo que el Congreso del Estado hizo al distinguido chiapaneco, el mandatario acompañó en una guardia de honor a la esposa del poeta, la también escritora Elva Macías, a su hija Masha Zepeda y a su nieta Milena.
En este marco, Velasco Coello lamentó la gran pérdida que el fallecimiento de don Eraclio representa para el pueblo de México y de Chiapas, al tiempo de recordar su talento, ingenio y alegría, los cuales, dijo: “quedarán por siempre en la memoria de quienes tuvimos la oportunidad de conversar con él y aprender de sus historias, aprender de sus consejos y disfrutar sus anécdotas”.
“A partir de hoy lo extrañaremos por el vacío que deja en el mundo literario y por el vacío que deja en nuestros corazones, ya que ante todo, Laco como cariñosamente le llamáramos sus amigos, fue un gran amigo y sobre todo un hombre de un gran espíritu.”
El jefe del Ejecutivo resaltó el ejemplo de vida de Laco Zepeda, ya que amó a Chiapas y a través de su obra lo mostró al mundo, “se va un hombre sencillo, honrado y de amable sonrisa, que iluminó con sus palabras a quien gozó al escucharlo”.
Don Eraclio, apuntó Velasco, fue un excelente escritor que trazó su vida y obra a través de la palabra y de sus fuertes convicciones, lo que lo convirtió en un creador único, orgullo de las letras mexicanas y de Chiapas.
El Gobernador enfatizó que no es posible decir adiós a un hombre como don Eraclio Zepeda porque su obra y recuerdo vivirán por siempre, y serán la luz permanente para que las presentes y las futuras generaciones sigan su huella.
“Hoy, como Don Chico de su cuento, Laco vuela para siempre entre palabras que resuenan en todo el mundo con acento chiapaneco, con un gran contenido universal”, puntualizó Manuel Velasco.
Al hacer uso de la palabra, el escritor Javier Espinosa Mandujano realizó una semblanza sobre la vida literaria, social y académica del reconocido hombre de letras nacido en tierras chiapanecas.
Señaló que Eraclio Zepeda tuvo una vida intensa que compartió con grandes escritores de su tiempo, como fueron Rosario Castellanos y Jaime Sabines; fue miembro de la Academia Mexicana de la Lengua y del Sistema Nacional de Creadores de Arte y entre sus obras resaltan: Benzulul (1959), La espiga amotinada (1960) y Asalto nocturno (1979).
Su trabajo literario, continuó Espinosa Mandujano, también fue llevado a la pantalla grande a través de una serie de cortometrajes, dentro de los cuales destaca “Don Chico que Vuela”, que fue reconocido en varios festivales de cine.
Detalló que durante su trayectoria, fue reconocido con la Medalla Conmemorativa del Instituto Nacional Indigenista; el Premio Xavier Villaurrutia; el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Lingüística y Literatura, otorgado por la Secretaría de Educación Pública; la Medalla Belisario Domínguez, presea otorgada por el Senado de la República; así como el nombramiento Doctor Honoris Causa por la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas y la Universidad Intercultural de Chiapas.
En el ámbito político, Zepeda Ramos fue Secretario de Gobierno de Chiapas de 1994 a 1997.
Eraclio Zepeda Ramos falleció este jueves 17 de septiembre en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez, a la edad de 78 años.
En el Palacio Legislativo, la Casa del Pueblo, al pie del monumento de Benito Juárez, las y los diputados locales reconocieron ante familiares, amigos y admiradores, la amplia trayectoria de un gran ser humano, para finalmente despedirlo con un prolongado aplauso.