SAN JOSÉ, COSTA RICA, 15 de Octubre de 2013.- Pese a perder 1-2 ante Costa Rica y dejar en claro que no merece ir a la Copa del Mundo Brasil 2014, México se clasificó al repechaje ante Nueva Zelanda, gracias a la victoria de Estados Unidos 3-2 sobre Panamá.
Los goles que casi condenan al “Tri” fueron obra de Bryan Ruiz, al minuto 25, y de Alvaro Saborio, al 64. Oribe Peralta había logrado el empate momentáneo, al 29.
Con este resultado, el cuadro mexicano se quedó con 11 unidades para ocupar el cuarto sitio del hexagonal final, por encima de los “canaleros”, que se quedaron con ocho.
Ahora, el cuadro de la Concacaf buscará su pase a suelo sudamericano en los juegos ante los neozelandeses, que se disputarán el día 15 en casa y el 20 en suelo visitante.
México confirmó en 90 minutos lo que había enseñado en todo el hexagonal, que no merecía estar siquiera en el repechaje, sin embargo, su suerte es tan grande que su acérrimo rival se encargó de meterlo de rebote en el último suspiro, para así ahora seguir soñando con la justa mundialista.
La victoria sobre los panameños, con esa gran anotación de Raúl Jiménez, solo había maquillado la crisis que Víctor Manuel Vucetich había heredado de José Manuel de la Torre, y que fue incapaz de resolver en tan poco tiempo de trabajo.
México era consciente que debía enfrentar con corazón este duelo, que necesitaba jugar bien, y aunque tuvo un inicio prometedor, se fue complicando solo, no obstante, generaron las ocasiones de gol más importantes del primer tiempo, la mejor de ellas que Javier Hernández se encargó de desperdiciar de manera infantil, imperdonable e insólita.
La acción se gestó por derecha en un balón filtrado dentro del área para Oribe Peralta que cedió a “Chicharito”, quien ya sin portero y con el marco abierto hizo un mal contacto, lo que provocó que el balón le quedara a Oribe, quien estaba en fuera de lugar y aunque no quiso intervenir, al final se le marcó la posición adelantada.
Aliviados por este error y aleccionados de que en un partido decisivo se debe tener más determinación, los de casa no dejaron escapar la ocasión más clara que tuvieron en el primer lapso, en la que Bryan Ruiz le enseñó al número 14 de México cómo se debe definir.
El jugador del Fulham de Inglaterra aprovechó un rebote dentro del área para acomodarse de espaldas un balón a su pierna izquierda y prender un remate sólido que batió a Guillermo Ochoa, al minuto 25.
Cuando parecía que el mundo terminaba para el “Tri”, el equipo tuvo una reacción casi inmediata y providencial, al lograr el tanto del empate por medio de Oribe Peralta, al minuto 29.
Todo se originó en un gran balón filtrado de Carlos Peña para Hernández, quien intentó quitarse a Navas, que alcanzó a robarle el esférico.
El posterior rebote le quedó al jugador de Santos, quien con decisión prendió un disparo que pegó en el travesaño y cuando iba para afuera tocó la pierna de un zaguero para colarse al fondo de las redes, e irse con el 1-1 al descanso.
Los “ticos” no estaban conformes con el empate y retomaron el control del esférico para meter en propio terreno al cuadro visitante, que cuando parecía lograba salir avante de este agobio, vio como su cuadro bajo volvía a fallar para irse otra vez abajo en la pizarra.
La banda de la derecha, donde Jorge Torres Nilo fue un verdadero desastre, permitió que Christian Bolaños llegara hasta línea de fondo para mandar un centro al área, donde Alvaro Saborío, sin marca alguna, se levantó para conectar un sólido cabezazo y dejar sin oportunidad a Ochoa, al minuto 64.
Con el marcador en contra, Víctor Manuel Vucetich no tuvo otra opción que ir por todo al frente y para ello ordenó el ingreso de Raúl Jiménez, en busca de que el jugador del América sacara otra genialidad como la que hizo ante Panamá.
Y cerca estuvo el americanista de hacerlo, con un cabezazo que iba al fondo de las redes, solo que Navas, en un lance increíble, metió las “uñas” para salvar su meta.
Completamente nublado en su juicio, Vucetich agotó sus cambios con el ingreso de Giovani Dos Santos e Isaac Brizuela, dejando en la banca a gente como Lucas Lobos o Aldo de Nigris.
Los de casa tuvieron para aumentar su ventaja, pero ya no le hicieron daño a México, que nunca tuvo la mínima oportunidad para aspirar al empate y pese a ello, gracias al cuadro de las “barras y las estrellas” está en repechaje ante Nueva Zelanda, donde se jugará su pase al Mundial y esconder un poco este fracaso.
El arbitraje estuvo a cargo del guatemalteco Walter López, quien tuvo una labor poco satisfactoria al dejar de marcar un claro penal contra la visita, además que dejó pegar mucho al local.