• Es un modelo saludable de origen mesoamericano que tiene como centro nutritivo cultural el maíz, frijol, chile y calabaza
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chiapas; 15 de Octubre de 2020.- En el marco del Día Mundial de la Alimentación, el Hospital Regional “Dr. Rafael Pascacio Gamboa” promueve el consumo de alimentos de alta producción en la región, con la Dieta de la Milpa.
Entre los beneficios de esta dieta están: balance de proteínas, grasas, carbohidratos, vitaminas y minerales en las cantidades que requiere el cuerpo, privilegiando el consumo de cereales como el maíz y amaranto; leguminosas y frutas con alto contenido de antioxidantes y fibra, lo cual reduce el riesgo de padecer enfermedades crónico-degenerativas.
La Dieta de la Milpa es un modelo saludable de origen mesoamericano que tiene como centro nutritivo cultural los productos de la milpa como el maíz, frijol, chile y calabaza, además de los alimentos de origen mesoamericano que se consumen en México, junto con aquellos adoptados por la cocina tradicional mexicana de origen externo combinados de manera saludable, informó Su Ling Omara Solís Segovia, jefa del Servicio de Nutrición y Dietética del Hospital Regional “Dr. Rafael Pascacio Gamboa”.
Añadió que esta dieta se aplica a todos los pacientes, incluidos los que padecen obesidad, cáncer, diabetes y desnutrición. Los menús elaborados en este hospital están diseñados bajo este modelo, asegurándose de que cada paciente reciba una adecuada, variada, equilibrada inocua y completa alimentación.
“La Dieta de la Milpa nos ofrece un mayor consumo de fibra, aporte adecuado de vitaminas y minerales, suficiente cantidad de energía; es para toda la familia, es económica y accesible. Además, se puede iniciar desde los seis meses de vida hasta la edad adulta mayor”, agregó.
Este año, bajo el lema “Cultivar, nutrir, preservar. juntos”, el Día Mundial de la Alimentación hace un llamado a la solidaridad mundial para ayudar a las personas más vulnerables a que se recuperen de la crisis y hacer que los sistemas alimentarios sean más resilientes y robustos, de manera que puedan resistir el aumento de la volatilidad y los choques climáticos, proporcionar dietas saludables, asequibles y sostenibles, y medios de vida dignos a los trabajadores del sistema alimentario.
La alimentación es la esencia de la vida y la piedra angular de nuestras culturas y comunidades. Preservar el acceso a alimentos inocuos y nutritivos es y seguirá siendo una parte esencial en la respuesta al coronavirus, especialmente de los más pobres y vulnerables del mundo, que son los que más han sufrido el impacto de la pandemia y que se verán más afectados por las perturbaciones económicas.
En un momento como éste, la Organización de las Nacionales Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) considera que es más importante que nunca reconocer la necesidad de apoyar a nuestros héroes de la alimentación, agricultores y trabajadores de todo el sistema alimentario, que garantizan que los alimentos lleguen de la granja a la mesa, incluso en medio de perturbaciones sin precedentes como la crisis actual de COVID-19.