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+ El Obispo de la Diócesis de San Cristóbal urgió a las comunidades de Chenalhó, a sus líderes, y a las autoridades estatales a buscar una salida pacífica al conflicto postelectoral en esa aquella localidad
SAN CRISTÓBAL DE LAS CASAS, Chiapas, 19 de Marzo de 2017/Noticias/Diario Tribuna Chiapas/2017.-El obispo de la diócesis local, Felipe Arizmendi Esquivel urgió a las comunidades de Chenalhó, a sus líderes, y a las autoridades estatales a buscar una salida pacífica al conflicto postelectoral en aquella localidad, donde dos grupos antagónicos se disputan el ayuntamiento municipal.
Por esta disputa del poder en el municipio indígena de los Altos de Chiapas se han escenificado diversos conflictos que han subido de nivel al grado de romper la paz y tranquilidad de sus habitantes.
Ante la situación de violencia mucha gente inconforme quiere apoderarse de nuevo del palacio municipal, retomado el 22 de febrero por seguidores de la alcaldesa Rosa Pérez Pérez, lo que ha dejado de a la fecha dos muertos y 16 lesionados de bala, agregó.
Por lo anterior, Felipe Arizmendi en conferencia de prensa reiteró el llamado a la paz y tranquilidad en la localidad tzotzil y u n exhorto guardar las armas, que las entierren o destruyan porque no son para matar.
Expuso que el hecho de que Pérez Pérez se haya reinstalado en el palacio municipal el 14 de este mes, es una buena acción porque le corresponde por ley, pero dijo estar preocupado pues citó los hechos violentos del 22 de diciembre de 1997 en el que fueron asesinados 45 indígenas en Acteal, y pudiera repetirse la historia por las acciones violentas que han ocurrido.
La semana pasada la parroquia de San Pedro Chenalhó y sus catequistas manifestaron su gran porque ven mucha división en el municipio, comunidades contra comunidades, autoridades contra autoridades y sobre todo intereses contra intereses, indicó el prelado.
Arizmendi Esquivel señaló que como obispo no le corresponde decidir a quién le corresponde un puesto u otro, para ello hay instancias oficiales, lo que le preocupa es la vida y la paz del pueblo porque hemos tenido en ese municipio acciones muy tristes.
Desde hace muchos años hay armas en la localidad, de una y la otra parte, y eso es lo que más me preocupa, reveló el obispo.
Las armas están ocultas pero a la hora de la hora salen, por lo que dijo estar muy preocupado, no obstante espera a que se llegue a acuerdos, que las autoridades estatales ayuden a resolver este conflicto entre grupos.
Indicó que ha estado en comunicación con el secretario de gobierno, Juan Carlos Gómez Aranda y con el presidente del Congreso, Eduardo Ramírez Aguilar, tratando de ver qué se puede hacer.
Sin embargo, dijo, “aun ellos no encuentran una solución inmediata”, porque cuando una persona quiere detentar el poder no acepta otra posibilidad y hay mucha gente que la rechaza, uno se pregunta qué es lo que a las personas les interesa: el poder, quizá el dinero detrás del poder o el bien del pueblo.
Cuando a alguien le importa el bien del pueblo se hace a un lado si es el causante de problemas, pues lo que importa es ver qué mueve a las personas, pero que el bien de Chenalhó u otro tipo de intereses económicos o políticos.
Felipe Arizmendi exhortó a los pobladores de Chenalhó a privilegiar el diálogo, no a acciones violentas. Discutir, dialogar, y que cada quien sepa ceder sus posturas porque está por encima de todo el bien el bien y la paz social, eso es lo importante.
El obispo de San Cristóbal consideró que no serviría de mucho que las autoridades intentar un desarme en el municipio porque muchas veces lo han intentado y no han podido.
Si no hay la convicción de las personas y grupos la sólo fuerza del gobierno no es suficiente, lo que importa es desarmar los corazones más que sólo las armas materiales, concluyó./Noticias/Diario Tribuna Chiapas/2017