viernes , noviembre 1 2024

LETRAS DESNUDAS

16 Marzo 2018

MARIO CABALLERO

UN MATRIMONIO TODOPODEROSO

Edgar Leopoldo Gómez, presidente municipal de Tila, está acusado de tener nexos con el crimen organizado de Tabasco, malversación de recursos públicos, enriquecimiento ilícito y violación a los derechos humanos. Carlos Cleber González Cabello, alcalde de Sabanilla, está señalado de tráfico de influencias, encubrimiento de criminales y de desviar dinero del municipio para fines políticos personales. La organización Paz y Justicia ha sido muchas veces incriminada en casos de violencia, desapariciones forzadas, secuestros, hurtos y asesinatos. Así como éstos hay otros grupos caciquiles, operadores políticos y presuntos empresarios de la construcción que literalmente tienen secuestrados esos dos municipios.

Sin embargo, todos son solamente lacayos de una bien definida red de corrupción. Los que la dirigen son Límberg Gregorio Gutiérrez Gómez y Sandra Luz Cruz Espinosa, un matrimonio que ha convertido esa zona en un feudo.

DIEZ AÑOS DE ESCLAVITUD

12 años de esclavitud es una película dirigida por Steve McQueen que narra la historia de un negro libre que un día es secuestrado por dos hombres que lo venden como esclavo. Basada en hechos reales, el protagonista es obligado a ocultar su identidad como hombre libre y a trabajar en haciendas en condiciones inhumanas junto con otras personas de su misma raza. Durante doce años, sufre hambre, maltrato físico y sicológico, hasta que un buen samaritano lo ayuda a recuperar su libertad y volver con su familia. Después de eso nada vuelve a ser igual para él. Viejo, casando y con muchas cicatrices en el cuerpo, luchó hasta el día de su muerte por una justicia que nunca obtuvo.

Así están los habitantes de Tila y Sabanilla desde hace más de diez años. Siendo dos municipios constitucionalmente libres, padecen el secuestro de sus gobernantes que los han privado de la paz, la tranquilidad, los beneficios de los programas sociales, la obra pública y el progreso. No tienen justicia.

Límberg Gregorio Gutiérrez fue presidente municipal de Tila en el periodo 2008-2010, en una primera ocasión. Antes había sido director de Obras Públicas durante la gestión de Juan José Díaz Solórzano, y fue señalado por los comunitarios de robar el presupuesto de las obras para financiar su campaña política hacia la alcaldía, dejando varios proyectos en malas condiciones y otros sin concluir.

Para el caso, la organización “Paz y Justicia” estuvo formado por viejos priistas que supuestamente desapareció hace muchos años después de haber sido combatido por el gobierno del estado, aunque aún persisten varias células que conocen el tejemaneje de la política local, los usos y costumbres, y las tácticas de intimidación. Es a éstas a las que se ligó Límberg Gutiérrez para gobernar el municipio y enfrentar a sus opositores.

En una ocasión, ilegalmente adquirió un predio propiedad del ejido donde se disponía a construir un campo deportivo. Pero sólo era una maniobra para apropiarse de los terrenos. Ante los reclamos de los propietarios, el alcalde los reprimió con los paramilitares que estaban armados con palos, piedras y armas de fuego.

En ese trienio, Gutiérrez Gómez se enriqueció y compró ranchos, ganado de registro, caballos cuarto de milla, residencias, vehículos de lujo y hasta obtuvo concesiones de transporte público de las rutas Salto de Agua-Palenque. Terminó su administración imponiendo en la presidencia municipal de Tila a su esposa Sandra Luz Cruz Espinosa, del PVEM. Nadie mejor para ocultar sus pillerías.

En la gestión de Sandra Luz, la Junta de Buen Gobierno del caracol zapatista “Que habla para todos” denunció amenazas de muerte, robos, daños en propiedad privada y despojos contra las bases de apoyo del EZLN de la comunidad San Patricio. Vinculaban a la violencia a los grupos paramilitares Paz y Justicia y Unión de Comunidades Indígenas, Agropecuarias y Forestales, que iban desplazando a las familias para quitarles sus tierras.

El 17 de septiembre, los ejidatarios emitieron un comunicado: “Los invasores dijeron que todos los daños los va a pagar la presidenta municipal de Tila, que ella ordenó que se queden viviendo en el predio. Dicen (los invasores) que van a apropiarse de todas las pertenencias que tienen nuestros compañeros y aseguran que van a matar a 3 de nuestros compañeros. Todos estos actos delictivos que hacen, aclaran que cuentan con el apoyo de Sandra Luz Cruz Espinosa”.

Aparte, la alcaldesa designó toda la obra pública de manera directa a las empresas constructoras de Límberg Gregorio Gutiérrez, que operan hasta el día de hoy bajo prestanombres. Sus principales cómplices en esos actos delictivos fueron Carlos Cleber González Cabello, ex director de Obra Pública de Tila, Genaro Vázquez Pérez, ex presidente municipal de Sabanilla, y Mario Landero Cárdenas.

En 2012, Sandra Luz, su esposo Límberg Gregorio y el perredista Genaro Vázquez, impulsaron a Carlos Cleber González a la presidencia municipal de Sabanilla. Su intención era tener el dominio de ese municipio, controlar el dinero público y acaparar las obras de dicha localidad que serían asignadas a las constructoras del matrimonio Gutiérrez Cruz. Pero el negocio se le vino abajo con la derrota de Cleber.

No obstante, Límberg Gutiérrez “ganó” los comicios de ese año para ser presidente municipal de Tila por segunda vez.

Comenzó esta nueva gestión tratando de quitar los terrenos ejidales para la construcción de un centro comercial. Para lograr su objetivo organizó un grupo de comerciantes dependiente de la CROC, que provenían de algunas comunidades y eran encabezados por Jesús Gilberto Gutiérrez Pérez, que reprimió a los pobladores e intentó destruir el casino del pueblo que se ubicaba dentro de esos predios. Finalmente dicha plaza no pudo ser realizada porque las autoridades mandaron su suspensión inmediata mediante la resolución de un juicio.

En los años siguientes, Tila estuvo en el abandono con un alcalde que se la pasaba de juerga en la ciudad de Villahermosa, Tabasco, con viáticos pagados con el erario municipal. No hubo obras ni asistencia social. Mientras los niños y mujeres se morían de hambre y de enfermedades curables como la diarrea, Límberg Gutiérrez engordaba sus cuentas bancarias y su patrimonio.

LOS TESTAFERROS

Durante las elecciones de 2015, Límberg Gutiérrez utilizó dinero público y los grupos paramilitares para imponer a su sucesor tal como lo afirman los habitantes de Tila.

En el periodo de campaña, el alcalde mandó instalar un retén en un lugar que se llama La Palapa, donde por medio de chantajes obligaban a la población a apoyar a Edgar Leopoldo Gómez Gutiérrez, primo hermano de Límberg Gutiérrez. Durante días, quemaron llantas, hicieron explotar bombas molotov e hicieron disparos al aire en diferentes partes del municipio y en las comunidades.

Pero debido a la obligación de cumplir con la paridad de género en las candidaturas, Leopoldo Gómez fue bajado de la candidatura y pusieron en su lugar a Fabiola Vázquez Ortiz, que renunció seis meses después de tomar protesta como alcaldesa de Tila para que el primo de Límberg Gutiérrez asumiera la presidencia municipal. Desde entonces, en el lugar reinan las muertes inexplicables, las desapariciones de líderes políticos y sociales, la delincuencia y el terror de los paramilitares.

Lo que no lograron Sandra Luz y Límberg en 2012, lo hicieron en las elecciones de 2015 haciendo ganar la alcaldía de Sabanilla para su fiel trabajador Carlos Cleber González Cabello. Ahora mismo, ese pueblo está en el abandono gubernamental, con calles destruidas, sin luminarias, sin agua potable, con clínicas que no tienen ni siquiera una aspirina, pero con el dinero de las obras públicas fluyendo a borbotones hacia las empresas de la pareja Gutiérrez Cruz.

TRAS EL PODER

En este momento, Sandra Luz Cruz Espinosa es diputada local con licencia. Busca repetir como alcaldesa de Tila. Y para ello la diputada ha amenazado a la gente con que si no votan por ella no los va a incluir en los programas de asistencia social.

Asimismo, en Tila y en Sabanilla, ese matrimonio ha vuelto a ordenar a los hoy presidentes municipales a utilizar los grupos paramilitares para fomentar el terror y controlar la oposición a punta de pistola y acabar con la autonomía ejidal, que se opone a otros tres años de ignominia y corrupción. En el colmo, está apoyando la reelección de Carlos Cleber González en la alcaldía de Sabanilla. ¡Chao!

@_MarioCaballero

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

catorce + diecinueve =