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Palabras JJustas

Lulú Ovilla

6 de marzo de 2019.

No queremos cárceles llenas de feminicidas, sino que ya no haya mujeres asesinadas.

300 fueron los feminicidios en el sexenio de Manuel Velasco.

Sociedad civil y empresarial se suman para erradicar la violencia hacia las mujeres.

Cuando ya se acerca el día Internacional de la Mujer como cada 8 de marzo, siempre empezamos a escuchar o a leer, no hay nada que celebrar, o no es un día para festejar, frases que ya suenan muy gastadas, pero al mismo tiempo nos siguen adoleciendo, pero ¿porque se siguen repitiendo estas frases?, por la sencilla razón de que no se ha entendido el respeto que se le debe de tener a la vida de una mujer o a la de una niña.

El odio con que es asesinada una mujer es lamentablemente y doloroso y aun cuando los feminicidas son encarcelados y se llenen las cárceles  de ellos, no significa que se logre poner fin a los asesinatos, nuestro Código Penal necesita ser modificado para que los feminicidios sean un delito grave, ya que no lo es, esto según Senadores de la Comisión de Puntos Constitucionales, quienes dijeron que no se debe de elevar a rango de grave.

Que es lo que habrá pasado por la cabeza de Eduardo Ramírez Aguilar, Presidente, Gloria Elizabeth Núñez Sánchez, Secretaria y Sylvia Beltrones Sánchez, también como secretaria, todos flamantes integrantes de la Comisión de Puntos Constitucionales, para que pensaran que matar a una mujer no significa un delito grave, dos mujeres que no hicieron nada al respecto aun cuando son mayoría dentro de la Comisión a su cargo.

Por este tipo de actitudes es que no se avanza en cuanto a la forma de castigar a un feminicida, mujeres que son serviles al poder y que todo lo hacen a modo, mujeres que creen que por tener el poder en sus manos nunca les puede pasar nada, quizás a ellas no porque siempre estarán custodiadas de personal de seguridad, pero tienen amigas, hermanas, primas, etc., que no tienen quien las custodie y es entonces cuando la realidad las alcanza.

Las cárceles llenas de feminicidas no son una solución, ni significa que ya se hizo justicia, justicia  será cuando ya no haya más hombres matando con un odio inimaginable a ninguna mujer, que el delito de matar se eleve a rango de grave, se dijo que en febrero dicho dictamen sería analizado ya que no había sido aprobado, así que esperamos tener buenas noticias durante marzo.

El sexenio de las muertas

Si algo distinguió el sexenio del ex gobernador sustituto y hoy actual Senador de la Republica Manuel Velasco, fue que su gobierno fue fallido, demasiados fraudes, robo a empleados, empresas, despojos y todo lo que ya todos saben, sencillamente Chiapas nunca tuvo crecimiento, simulo gobernar un estado al cual le quito hasta el último centavo.

Lo que sí es imperdonable que su sexenio lo haya manchado con la muerte de 300 mujeres asesinadas o quizás un poco más, entre estos feminicidios no hay ni el 50 por ciento de los asesinos en las cárceles, nunca hizo nada por las mujeres, solo las excluyo  las utilizo para presumir su imagen ególatra y para justificar gastos millonarios dándoles solo limosnas.

Manuel Velasco, logro colarse a la cuarta transformación y aun cuando se está manejando con perfil bajo, acá en Chiapas lo siguen recordando ya que dejo endeudado a Chiapas y con centenares de problemas, que ahí se van resolviendo poco a poco, como es el caso de los maestros, que sin ser problema del actual gobierno de Rutilio Escandón, dicho adeudo ya ha sido solventado.

Todo suma

Ante la ola de violencia que se está viviendo en la ciudad de México y derivado del acoso o intentos de secuestro en estaciones del metro,  sociedad civil y comerciantes  han emprendido medidas estratégicas de prevención y reacción ante emergencia, este fenómeno se dio cuando mujeres armadas de valor decidieron hacer su denuncia a través de sus redes sociales, logrando que su denuncia se vilarizara.

Fue así como una denuncia que antes era silenciosa, ignorada, opacada por el burocratismo, falta de sensibilidad o preparación, hoy se haya logrado visibilizarla, gracias al valor de estas mujeres al realizar su denuncia en redes, hoy se suman personas que han tomado conciencia ante la ola de violencia hacia las mujeres y con el #NiUnaMás, ahora se ven letreros de apoyo para mujeres en riesgo.

Y porque no solo en la ciudad de México, existen acosos, secuestros, abusos sexuales, etc., también sociedad civil y empresarios Chiapanecos se suman al protocolo de protección hacia las mujeres, ya hemos visto calles más iluminadas, pero existen focos rojos donde los asesinos de mujeres tienen sus bases, ahí es donde se debe de poner total atención y erradicar cualquier tipo de violencia.

Por supuesto que estas medidas de seguridad emprendidas, frenan la violencia hacia las mujeres, pero si al llegar a manos de nuestras autoridades encargadas, no se tipifica como delito grave el feminicidio, así se echen andar mil protocolos de seguridad, de nada servirá y los feminicidas seguirán riéndose de nuestras leyes, todos deberían estar en la misma sincronización y sin ningún interés de grupo.

Los programas dirigidos a mujeres solo sirvieron para desviar recursos y en más de diez años las políticas de igualdad de género fueron limitadas, existen deficiencias en el Instituto Nacional de las Mujeres, su programa requiere un reajuste ya que cuenta con los instrumentos de medición que le permitirán saber en que condiciones se halla dicha institución, esto en base a las observaciones de la Auditoria Superior de la Federación.

Nadine Gasman Zylberman tiene un gran reto ahora que llega al Instituto de las Mujeres y es implementar el Programa Nacional para la igualdad de Oportunidades y reajustar principalmente el presupuesto para que se acaben los despilfarros y desvíos simulando trabajar en pro de las mujeres.

Afortunadamente existe deseos de hacer algo en cuanto a los feminicidios y a la llegada de la cuarta transformación, se han recuperado carpetas de investigación sobre muerte de mujeres en la ciudad de México, Ernestina Godoy será quien coordine los trabajos en esa materia, pero en muchos casos que se encontraran en esas carpetas, es que los feminicidios no están catalogados como feminicidios.

La muerte de una mujer no debe de verse con tinte político, ni debe de ser indiferente, nadie debe de ser indolente ante el asesinato de una mujer, con poder o sin poder, la vida de una mujer debe de ser protegida, todas merecemos vivir una vida libre de  violencia, que matar a una mujer no se vuelva cotidianidad.

 

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