20 Enero 2016
Rodrigo Ramón Aquino
Candidatos naturales o inevitables II
En cuarto lugar en esta identificación de perfiles destacados, se sitúa el Partido Mover a Chiapas, cuyo cuadro político más destacado y conocido es su fundador, dirigente y candidato perdedor a la alcaldía de San Cristóbal de Las Casas, Enoc Hernández Cruz.
Este actorazo político es de todo, presidente de partido, director a control remoto del Icatech, dirigente de la asociación civil que tiene el nombre del abuelo del gobernador, dirigente de locutores y mucho más.
Es incondicional del gobernador del estado y por tanto se espera, que, llegado el momento, su partido busque aliarse con otros colores que le sean convenientes al proyecto sucesorio oficial.
En el caso del PRD es evidente que el cuadro político más destacado y conocido por su condición de senador de la República es Zoé Robledo. La falta de liderazgos locales, la aparente docilidad del comité estatal para con el gobierno, los pobres resultados en las pasadas elecciones, y un destacado papel como legislador —no lo digo yo, así lo han calificado los más importantes portales especializados en medición de desempeño legislativo—, lo sitúan como el candidato natural del Sol Azteca, aunque en este momento el propio dirigente estatal jure lo contrario.
A lo anterior habría que sumarle que durante sus primero tres años como legislador, Robledo tejió una importante relación con los más destacados políticos e intelectuales del país, lo que se traduce en un amplio capital político que será determinante en las futuras definiciones. Si va con el PRD, es fácil prever que Zoé buscará construir una amplia alianza opositora, y de cerrársele las puertas amarillas, aún tendría la opción de buscar a Morena o lanzarse independiente.
En el PAN no vamos a tener que ir muy lejos. La candidatura de Paco Rojas en Tuxtla y el voto inconforme que vio en Rojas la posibilidad de evitar que la aplanadora oficial cumpliera su propósito le salvaron el pellejo al partido. Es pues el polémico tuxtleco el cuadro más destacado y conocido hoy por hoy en el Acción Nacional. Si alguien es competitivo por sí solo en esas filas, es el que casi vuelve a ser presidente municipal de la capital. Su permanencia en el partido dependerá de quién es elegido o elegida nuevo dirigente estatal. Si es Janeth Ovando, Paco deberá empezar a hacer maletas.
ÁGORA
Yo, como Catón, empiezo a sospechar que tengo más de tres lectores. Supongo que a veces están de acuerdo conmigo, otras no tanto y así me lo hacen saber. Tecleador y lector en franca comunidad. Viviendo, en resumen.
Ayer comenzamos una suerte de identificación de los cuadros políticos más destacados de cada partido político en este momento (enero de 2016), mismos a los que pretendemos conferirles la condición de “candidatos naturales”, o, como bien observa un lector, los “inevitables”.
Nombramos a tres en la primera entrega: PVEM, PRI y Morena. Sobre el PRI me dicen los lectores tricolores que, efectivamente, Roberto Albores Gleason es el inevitable en este momento, pero que reducir el escenario alternativo a Willy Ochoa es un error, ya que existen cuadros igual o mejor posicionados, como José Antonio Aguilar Bodegas, más afín al gobernador.
Del PVEM no comentaron. Sospecho no hay mayores opciones. Ah, pero de Morena sí y sueltan: “¿Plácido Morales? ¿Seguro? Habría primero que preguntarse ¿Es compatible ser candidato del partido más opositor a EPN y al mismo tiempo funcionario del gobierno más amigo de EPN?” Habría que agregar: y no cualquier funcionario, sino el mismísimo coordinador general de gabinete.
Escribir es una gran responsabilidad cuando se tienen lectores así de participativos. Vamos a continuar con el ejercicio diagnóstico, pero tomaremos consideraciones como su relación con el gobernador, su relación con el poder central, su nivel de conocimiento, la fuerza o debilidad de su partido y la relación con la dirigencia nacional.
CORRILLO
NOMBRAMIENTO: Entre el circuito de los funcionarios públicos, empresarios y clase trabajadora ha sido bien recibida la noticia de la designación de Francisco Zorrilla como nuevo secretario del Trabajo de Chiapas. Al pedir opiniones sobre él, fue calificado, en general, como tecnócrata y experimentado. Es bueno saber que a tan estratégica secretaría llega una persona de capacidad probada, para ya dejar atrás, de una vez por todas, las improvisaciones, tan dañinas para el gobierno como para la población en general, que no tiene de otra que estar aguantando la lluvia de ideas de los improvisadores. Ojalá que los nuevos titulares de las secretarías hasta hoy permanecen sin timonel, sean expertos en su respectiva área —como es el caso de Zorrilla— para que se tenga la posibilidad de reponer las comisiones y omisiones acumuladas a mitad de sexenio y el cierre tenga mejor suerte.