04 Agosto 2015
Rodrigo Ramón Aquino
El interés tiene pies… de foto
El interés tiene pies, dice una frase popular. Entiendo que se trata de llevar agua al molino de cada uno (es la primera vez que explico un dicho con otro, pero creo que funciona). Pero ahora también entiendo que puede referirse a los pies de foto.
Déjeme explicarle, pues, antes de que abandone la lectura. Ayer Roberto Albores Gleason, senador de la república y dirigente estatal del PRI, subió a su cuenta de Twitter una foto donde se le ve rodeando con su brazo meco el hombro moreno de Eduardo Ramírez Aguilar, dirigente estatal del PVEM.
“Un gusto compartir el pan y la sal con mi amigo @ramirezlalo_. Platica amena sobre diversos temas”, escribió Albores. La respuesta de los usuarios no se hizo esperar: “Ya que decline a su favor pues ya perdió Comitán” o “A ver cuándo comparten «el pan y la sal» también con el pueblo, eso sí se necesita de manera urgente”.
La provocación política de estos otrora “Dorian Gray” (por aquello de que no podían ver su face ni en pintura) se dio luego de que las dirigencias nacionales tanto del PRI como del PVEM anunciaran en conferencia de prensa que demandarán a Paco Rojas ante la PGR por los probables delitos de lavado de dinero y evasión fiscal.
Ya encarrerados, César Camacho y Arturo Escobar y Vega dijeron prácticamente que para qué hacen tanto escándalo las dirigencias del PAN y del PRD, si juntos no juntan ni el 5.6 por ciento de la votación total en Chiapas.
“Es más vergonzoso para el PRD que logra esa votación habiendo gobernado en dos ocasiones a Chiapas”, sostuvo Escobar.
También se da luego de que el presidente electo de Tuxtla Gutiérrez, Fernando Castellanos Cal y Mayor comentara en su cuenta de Facebook:
“Se ha anunciado en diversos medios de comunicación la construcción de un mirador volado en una de las paredes del Cañón del Sumidero, me gustaría conocer sus comentarios: ¿Que opinan de este proyecto? ¿Están a favor o en contra? ¿Jalamos o nos oponemos?”
Las críticas tampoco se hicieron esperar y no era para menos. La elección en Tuxtla Gutiérrez está impugnada y hasta que no resuelvan las instancias legales, Castellanos debería ser prudente. Ninguna necesidad tiene de provocar a los que aún continúan inconformes.
ÁGORA
En una reciente reunión de la Asociación de Columnistas Chiapanecos, mi amigo y colega Leonel Durante, autor de la columna Cartelera Política, tuvo la gentileza de regalarme un libro (que además de buen obsequio es un guiño a la inteligencia), lo cual agradezco mucho.
La obra en cuestión es la que reúne el trabajo periodístico que el académico e intelectual Daniel Cosío Villegas realizó en el periódico Excélsior a partir de los sucesos trágicos de 1968. Villegas, que hasta sus 70 años había destacado como economista, historiador, ensayista, editor diplomático y profesor, al final de su vida, sumó el título de “líder de opinión”.
De Cosío Villegas había tenido referencias por la traducción de la obra del economista Adan Smith, cuya lectura fue necesaria para cursar la materia Economía política y finanzas públicas en la maestría que llevo.
Tener en mis manos el pensamiento político de un mexicano constructor de instituciones (Fondo de Cultura Económica, Escuela Nacional de Economía, El Colegio de México), es la oportunidad de abrevar de la erudición puesta al servicio del lector desenfadado.
Y justamente ese es uno de los principales méritos de la obra “Labor periodística” (FCE, 2014) de Daniel Cosío: el saber académico que nutre textos de análisis y divulgación que no apuntan a un público especializado, sino a todo aquel que desee comprender la vida política del país.
Dejaremos por un momento las lecturas que tenemos en proceso y nos dedicaremos a conocer el pensamiento de quien es considerado uno de los hombres de mayor influencia intelectual que ha tenido México.
Por mi parte, le adelanto, le iré compartiendo de a poco y de vez en vez las “pepitas de oro” que me vaya dejando este preciado regalo. Gracias, de nuevo, amigo Leonel.
CORRILLO
De Cosío Villegas: “No hay sino un remedio: hace pública de verdad la vida pública del país”.