+ El sistema federal de bioseguridad arroja resultados positivos en la porcicultura
MÉXICO, D,F., 15 de Junio de 2014.- México presenta condiciones favorables para el desarrollo de la porcicultura. Este año se estima que la producción de carne de cerdo registre un crecimiento del orden de 3.38 por ciento, con la firme esperanza de que la actividad se consolide como una de las principales proveedoras de alimentos para la población mexicana.
En reunión de la Comisión de Ganadería de la Cámara de Diputados, encabezada por su presidente, Salvador Barajas del Toro, y el dirigente de la Confederación de Porcicultores Mexicanos, José Luis Caram Inclán, coincidieron en señalar que el sistema federal de bioseguridad ha dado resultados en el control de las principales enfermedades de los cerdos.
En este sentido, mencionaron que nuestro país está prácticamente libre de la Fiebre Porcina Clásica. Desde 2009 no se han presentado casos de la enfermedad. Prueba de ello, dijeron, es la exportación creciente de carne de cerdo mexicana a Japón y próximamente a China.
Sin embargo, apuntaron, es necesario que el gobierno de Estados Unidos reconozca esta condición para que México pueda exportar cortes especiales al mismo país del norte y, en esa medida, abrir otros mercados, en especial de Asia.
Tras entregar un reconocimiento al diputado Salvador Barajas del Toro, por el apoyo del Poder Legislativo al desarrollo de la porcicultura nacional, el presidente de los porcicultores, informó que recientemente se realizó en Cancún, México, el Congreso Mundial de Médicos Veterinarios Especialistas en Cerdos, en donde se destacó que esta carne es un alimento muy importante, la de mayor consumo en el mundo por encima de la carne de res y de aves, y tiene un futuro muy amplio.
En otro orden, con relación a la posibilidad de abrir cupos a la importación de carne de cerdo, dio a conocer que los porcicultores se reunieron con funcionarios de la Secretaría de Economía, para fijar su posición de negarse a esa eventualidad, sobre todo proveniente de terceros países con los cuales México no tiene firmados acuerdos de libre comercio.
Expresó su confianza de que, en el futuro no lejano, la porcicultura mexicana tendrá oportunidades extraordinarias de desarrollo. Hay indicios que así lo indican, apuntó, cuando vemos a países de la Unión Europea, por ejemplo, que van en decrecimiento por muchas razones: cuestiones ambientales, falta de granos y otras circunstancias de mercados que no les son favorables. Hay falta de terrenos, de espacios amplios, falta de agua para producir y nosotros los tenemos.
Reconoció que en algunas zonas del noroeste del país, se tiene un problema epidemiológico de una enfermedad emergente, la “diarrea epidémica de los cerdos”, que está confinada y bajo control del sistema bio-sanitario, sin que sea un padecimiento que afecte a los humanos.
Consideró como muy importante que no se ha detenido en ningún momento el sistema de producción de carne de cerdo, al grado de que, en años pasados, se sacrificaban animales de alrededor de 100 kilogramos de peso, mientras que en la actualidad van al rastro animales con un peso de 130 y 140 kilogramos
En los últimos años se recuperó el consumo per cápita nacional. De 15.5 hace cuatro o cinco años, en la actualidad andamos en 16.6 kilogramos de consumo por persona y esperamos que en el futuro se incremente de manera notable, apoyados en productos de calidad, sanidad e inocuidad.
La Cámara de Diputados ha sido el espacio donde hemos tenido la oportunidad de crecer, de romper paradigmas de la porcicultura y de la producción nacional, y tener las esperanzas con las cuales podemos operar y avanzar hacia un México sin hambre, un México productivo, un México suficiente que todos queremos heredar a nuestros hijos.