+ Convoca a recuperar la paz a través de la Guardia Nacional
Discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador, durante la ceremonia de Salutación a las Fuerzas Armadas en Campo Marte
CIUDAD DE MEXICO, 02 de Diciembre de 2018.- El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó la ceremonia de Salutación a las Fuerzas Armadas en Campo Marte.
Ante Generales, almirantes, jefes, capitanes, oficiales, tropa, clases y marinería, reconoció a las Fuerzas Armadas de México como un elemento importante para recuperar la seguridad y la paz en el país.
Acompañado del General Luis Crescencio Sandoval, secretario de la Defensa Nacional y del Almirante José Rafael Ojeda Durán, secretario de Marina, el presidente convocó a los integrantes de esta institución a conformar la Guardia Nacional si en determinado momento el Congreso avala esta propuesta que forma parte del Plan Nacional de Paz y Seguridad.
“Espero que pronto estas dos importantes instituciones nos ayuden, una vez si así se decide en el Congreso, que se reforme la Constitución para que podamos integrar la Guardia Nacional y, tanto la Secretaría de la Defensa, como la Secretaría de Marina nos apoyen, como siempre lo han hecho en otras tareas, para garantizar en el país la paz y la tranquilidad, atendiendo también funciones de seguridad pública”, explicó.
En un contexto de inseguridad y violencia en el que la Policía Federal ha resultado insuficiente para hacer frente a esa realidad, dijo, “estamos planteando que se reforme la Constitución para que el Ejército y la Marina puedan ayudarnos en labores de seguridad pública. Unir la Policía Militar, la Policía Naval, la Policía Federal y conformar la Guardia Nacional”.
López Obrador detalló que en una primera etapa será posible disponer de alrededor de 60 mil elementos provenientes de las policías Naval, Militar y Federal, para que posteriormente se integren miembros del Ejército y la Marina.
En la tercera etapa se contempla reclutar nuevos elementos, ampliando la convocatoria a jóvenes, para cubrir todo el territorio nacional con la creación de 266 coordinaciones ubicadas en distintas regiones de México.
“Tenemos siempre que ajustarnos a los nuevos tiempos. La renovación es importante, indispensable, hay cambios y nosotros tenemos que actuar en consecuencia. Vamos a seguir teniendo, desde luego, la labor de defensa de nuestro territorio, pero ahora el pueblo de México necesita de sus Fuerzas Armadas para atender este problema grave de la inseguridad y de la violencia, y hemos optado por este plan porque le tenemos confianza a las Fuerzas Armadas”, expresó el jefe del Ejecutivo.
Puntualizó que el cuerpo de seguridad conservará las condiciones laborales que actualmente tienen y se respetarán grados, disciplinas, ascensos, antigüedad e ingresos.
En su carácter de Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, reiteró la confianza en estas instituciones y los reconoció como “pueblo uniformado”, de origen humilde en su mayoría, que seguirán consolidándose a partir de la formación que reciben en las escuelas militares.
A la ceremonia asistieron los secretarios de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, y de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, así como la jefa de Gobierno electa, Claudia Sheinbaum Pardo.
Discurso del presidente Andrés Manuel López Obrador, durante la ceremonia de Salutación a las Fuerzas Armadas en Campo Marte
diciembre 2, 2018
Miembros de las Fuerzas Armadas de México
Generales, almirantes, jefes, capitanes, oficiales, tropa, clases, marinería de las Fuerzas Armadas.
General Luis Crescencio Sandoval, secretario de la Defensa
Almirante José Rafael Ojeda Durán, secretario de Marina
Amigas, amigos todos
Me da gusto que en este segundo día del nuevo gobierno estemos aquí con ustedes, quienes integran dos instituciones fundamentales de nuestro sistema político democrático, la Secretaría de la Defensa y la Secretaría de Marina, instituciones que son fundamentales para garantizar la seguridad nacional, la defensa de nuestro territorio, también para garantizar la seguridad interior, y espero que pronto estas dos importantes instituciones nos ayuden, una vez si así se decide en el Congreso, que se reforme la Constitución para que podamos integrar la Guardia Nacional y, tanto la Secretaría de la Defensa, como la Secretaría de Marina nos apoyen, como siempre lo han hecho en otras tareas, para garantizar en el país la paz y la tranquilidad, atendiendo también funciones de seguridad pública.
Ya en otras ocasiones lo he explicado. Ayer mismo en el Congreso, en la ceremonia de toma de posesión, hablé de que son pocos los elementos que se tienen para atender el problema grave de la inseguridad que se padece en el país.
Se creó hace 20 años la Policía Federal con el propósito de que las Fuerzas Armadas no intervinieran, como lo establece la Constitución, en tareas de seguridad pública, pero no pudo consolidarse ese agrupamiento. Son, en general, 40 mil elementos, y no todos pueden ser utilizados para labores de seguridad pública. Se cuenta en realidad con 20 mil elementos. De eso dispone el presidente de la república para enfrentar el problema que más preocupa a los mexicanos. Tienen más elemento o hay más elementos de policías en el Gobierno de la Ciudad de México, en las cuatro corporaciones tienen más e 80 mil elementos. Esto no puede continuar así
Por eso, con todo realismo, hablando de manera directa, transparente, estamos planteando que se reforme la Constitución para que el Ejército y la Marina puedan ayudarnos en labores de seguridad pública. Unir la Policía Militar, la Policía Naval, la Policía Federal y conformar la Guardia Nacional
Si esto se permite ya tendríamos de entrada más elementos. Tengo el informe de que hay alrededor de 30 mil elementos de la Policía Miliar y se puede contar de inmediato con 10 mil elementos más de la Policía Naval.
Si a esto se suman los 20 mil elementos de la Policía Federal, ya tendríamos un cuerpo para atender el problema de la inseguridad de alrededor de 60 mil elementos, y eso sería en el corto plazo porque, en una segunda etapa, convocaríamos a que miembros del Ejército y de la Marina también se adhirieran a esta Guardia Nacional en las mismas condiciones laborales: respetando grados, disciplinas, ascensos, antigüedad, ingresos, como otra fuerza de la Secretaría de la Defensa. Y en una tercera etapa ampliar la convocatoria a jóvenes, reclutar nuevos elementos para poder cubrir todo el territorio nacional con la creación de 266 coordinaciones ubicadas en las distintas regiones de México, para que se garantice la paz y la tranquilidad de los mexicanos.
Esta es una reforma para el Estado mexicano, para las instituciones y para las Fuerzas Armadas, porque tenemos siempre que ajustarnos a los nuevos tiempos. La renovación es importante, indispensable, hay cambios y nosotros tenemos que actuar en consecuencia. Vamos a seguir teniendo, desde luego, la labor de defensa de nuestro territorio, pero ahora el pueblo de México necesita de sus Fuerzas Armadas para atender este problema grave de la inseguridad y de la violencia, y hemos optado por este plan, porque le tenemos confianza a las Fuerzas Armadas, ya lo he dicho en otras ocasiones lo repito ahora, el soldado, el marino es pueblo uniformado.
Hace unos días estuve en una ceremonia parecida, hablé de que cuando revisé los expedientes de los generales en activo para decidir quién iba a ser el próximo secretario de la defensa, me llamó la atención que, cuando se inscribieron los generales en activo al Colegio Militar, la mayoría manifestó ser hijo de campesinos, de obreros, de mecánicos, de comerciantes, de soldados.
Nuestro ejército de arriba, sus oficiales, hasta sus soldados, hasta la tropa, tienen un origen popular, es un ejército del pueblo y, si nos remontamos en la historia, encontramos que este ejército se funda, se constituye en 1913, después del vil asesinato de un presidente bueno, Apóstol de la Democracia, Francisco I. Madero, un gobernador que hay que recordar por eso, fue el único que se rebeló, como lo hizo también un legislador, Belisario Domínguez y muchos otros.
Ese gobernador, Venustiano Carranza, de Coahuila, llamó al pueblo a enfrentar a Victoriano Huerta, y así se constituye este Ejército, que siempre ha sido leal a la autoridad civil; nunca una rebelión en contra de un presidente civil. Eso caracteriza también a nuestro Ejército. No es lo mismo que ha sucedido en otros países.
Tengo confianza también en las Fuerzas Armadas porque han actuado con responsabilidad y no se han mezclado, inmiscuido en negocios que se hacen a la sombra del poder. Los generales, los almirantes, no forman parte de la oligarquía, como suele pasar en otros países.
En la revisión de los expedientes veía que los generales, cuando mucho dos casas, un departamento, otra casa, dos carros, no hay oficiales millonarios, mucho menos multimillonarios, y otro rasgo distintivo, importante del Ejército de las Fuerzas Armadas: es un ejército nacionalista. Nunca este ejército va a estar subordinado a una hegemonía o a un gobierno extranjero. Este es un ejército patriota.
Por eso les convoco, en mi carácter de comandante supremo de las Fuerzas Armadas, para que todos juntos logremos resolver el problema de la inseguridad y de la violencia, y que se disipen las dudas pensando que esta decisión tiene que ver con medidas autoritarias, represivas. Esta es una gran institución y tiene escuelas para formar a sus integrantes, a sus miembros, de acuerdo a las nuevas circunstancias, a los nuevos tiempos, y estoy seguro de que se va a reforzar la formación en todo lo que tiene que ver con el respeto a los derechos humanos, y se va también a reforzar la formación para cumplir con los protocolos en el uso de la fuerza. Es un giro, un cambio, una reforma para bien de México y también para bien del Ejército, que sigue teniendo -a pesar de que en los últimos tiempos ha sido utilizado para tareas ingratas que le han producido ciertos desgastes-, a pesar de todo eso son las instituciones con más apoyo popular.
Cuando se hacen encuestas y se le pregunta a la gente a qué instituciones le tienen confianza, salen en primer lugar la Secretaría de la Defensa, la Secretaría de Marina, y se debe mucho, pienso yo, a las labores de auxilio que llevan a cabo las Fuerzas Armadas, que son los primeros en llegar cuando hay una inundación, cuando se padece de temblores, de terremotos, siempre ahí están los elementos, los soldados, los marinos, auxiliando a la población, y muchos otros servicios que prestan las Fuerzas Armadas.
Ahora, en esta nueva etapa, se van a seguir consolidando las Fuerzas Armadas, se va a fortalecer su grandeza porque van a ayudar en la tarea de la seguridad pública.
Me da mucho gusto estar con ustedes, repito, en este segundo día del gobierno de la trasformación, de la Cuarta Transformación y no me gusta sólo decirlo, enunciarlo, así como si fuese lema de campaña.
Han habido, por eso lo explico, tres trasformaciones en la historia de nuestro país, de nuestro querido México. La primera fue la Independencia, cuando, después de 3 siglos de dominación colonial, México se convirtió en un país libre y soberano.
La Segunda Transformación fue el movimiento de Reforma y la lucha del pueblo contra los invasores extranjeros. Ese movimiento que encabezó el mejor presidente que ha habido en la historia de nuestro país, Benito Juárez García, que restauró nuestra república.
Y la Tercera Transformación fue la revolución de 1910, cuando nuestro pueblo luchó por la justicia y la democracia.
Ahora nosotros queremos llevar a cabo sin violencia, de manera pacífica, desde abajo, con la gente, no imponiendo nada, queremos llevar a cabo la Cuarta Transformación de la vida pública de nuestro país que, como lo dije ayer, va a consistir en que se ponga por delante la honestidad y la fraternidad.
Honestidad y fraternidad como forma de vida y como forma de gobierno, porque, lo que más nos ha dañado en los últimos tiempos ha sido la corrupción, y vamos a acabar con ese cáncer que está destruyendo a nuestro pueblo, que está afectando a nuestra nación.
Yo sé que voy a contar con ustedes, integrantes de las Fuerzas Armadas.
Muchas gracias a todas, a todos. Nos vamos a seguir encontrando. En lo institucional hemos decidido reunirnos todos los días con el general Luis Crescencio Sandoval, con el almirante José Rafael Ojeda Durán, con la doctora, licenciada Olga Sánchez Cordero, secretaria de Gobernación, con el doctor Alfonso Durazo, secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, y vamos también a invitar a estas reuniones, porque ella lo ha solicitado, a la doctora Claudia Sheinbaum, jefa de gobierno electa de la Ciudad de México.
Nos vamos a reunir todos los días, de lunes a viernes a las 6 de la mañana para recibir en Palacio Nacional el parte, el reporte de lo sucedido en el país y tomar decisiones conjuntas. Todos los días vamos a llevar a cabo esta labor.
Y nos vamos también a seguir encontrando porque yo voy a visitar los fines de semana, como lo he hecho siempre, los pueblos y allá, ustedes cuando estén francos, o sus familias, nos vamos a estar comunicando, porque voy a seguir recorriendo todo el país, habando con los ciudadanos, no va a haber divorcio entre pueblo y gobierno. Vamos a seguir teniendo comunicación.
Les digo también que no se puede enfrentar un problema de inseguridad sólo con el uso de la fuerza. La paz y la tranquilidad son frutos de la justicia. No nos va a costar mucho trabajo garantizar la paz y la tranquilidad, porque se va a atender al pueblo, porque se va a llevar a cabo un programa de apoyo a las actividades productivas, se va a rescatar al campo del abandono en que se encuentra. Se va a apoyar a comuneros, ejidatarios, pequeños propietarios; se van a impulsar muchos proyectos de desarrollo de sur a norte del país, para que haya empleos.
Todos los jóvenes que ahora no tienen trabajo, y se les etiquetó, y se les llama ninis, porque ni estudian ni trabajan, y no es culpa de ellos, van a ser contratados. Ya se está haciendo un censo, se están visitando las casas para ir incorporando a los jóvenes al estudio y al trabajo, 2 millones 300 mil jóvenes van a tener empleo y se van a entregar más de 10 millones de becas en todos los niveles de escolaridad.
Los adultos mayores van a recibir el doble de lo que ahora se les otorga de pensión. Va a haber ahora apoyo para discapacitados pobres, sobre todo niñas, niños. Va a haber mucha justicia y esto va a crear un ambiente, una atmósfera nueva de satisfacción, y se va a hacer a un lado la frustración, y ya no se va a seguir empujando a los jóvenes a que tomen el camino de las conductas antisociales.
Por eso se va a conseguir la paz entre todos, por eso tengo la confianza de que vamos a lograr la paz y la tranquilidad en nuestro querido México.
Muchas gracias a la Fuerzas Armadas por su lealtad, a México por su lealtad a la patria. Esa es la lealtad que más vale, la lealtad a los principios, a los ideales, más que la lealtad a los hombres, porque la patria es primero.
Que vivan las Fuerzas Armadas de México.
Que viva México.
Viva México.
Viva México