SEUL, COREA, 30 de Septiembre de 2013.- Seúl. Un equipo de científicos fabricó por primera vez gasolina con técnicas de biología sintética a partir de la Escherichia coli (E. coli), bacteria que vive en el interior del intestino de muchos mamíferos.
Según la revista especializada Nature, los investigadores identificaron el proceso mediante el cual lograron segrerar alcanos de cadena corta, o lo que es lo mismo, pequeñas cantidades de gasolina.
Los expertos consideran que esta biogasolina podría acabar con la dependencia del petróleo, el denominado oro negro.
En la actualidad, los miembros del Instituto Avanzado de Ciencia y Tecnología, en Corea del Sur, tienen una capacidad de fabricación mínima, aunque produjeron 580 miligramos de gasolina por litro cultivado.
Sobre el tema, los científicos señalan que el objetivo a largo plazo es mejorar la producción y abaratar el coste.
Hoy, la mejor alternativa a los combustibles fósiles es el biodiésel, procedente de aceites vegetales o grasas animales; sin embargo, éste no puede utilizarse en los motores modernos.
Por el contrario, la gasolina bacteriana sería totalmente compatible sin tener que modificar el motor para su uso, indican los expertos.
La E. coli forma parte de la flora intestinal y dentro de su proceso natural está tomar azúcar para convertirlo en grasa.
Hace unos meses, científicos británicos también fabricaron combustible a partir de esta bacteria usando técnicas de biología sintética.
En ese momento, el equipo logró modificar los genes para que, en lugar de grasa, el azúcar se convierta en moléculas de combustible sintético.
La mayoría de las E. coli dentro del intestino humano son inofensivas, pero algunos tipos pueden producir enfermedades y causar diarrea.