+ Acusan que fueron desplazados de manera deshonesta, desleal y traidora, convirtiendo al partido en coto de poder personal y faccioso, rotándose entre ellos las posiciones políticas
+ Manejan las prerrogativas del partido con la mayor discrecionalidad y opacidad que haría sonrosar a las peores camarillas, pues nunca rindieron, ni han rendido cuenta alguna
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chiapas, 13 de Marzo de 2015./Tribuna Chiapas.- Nueve miembros fundadores del Partido del Trabajo en Chiapas, quienes con otros grupos del movimiento social se comprometieron a desarrollar orgánicamente al partido e implantarlo territorialmente en todo el estado, sin abandonar el trabajo con las organizaciones sociales de donde proveníamos, haciendo realidad en la práctica los postulados políticos e ideológicos, de construcción desde abajo, del Poder Popular, decidieron renunciar a más de 24 años de militancia de este instituto político.
A través de una carta enviada al coordinador nacional del PT, Alberto Anaya, Neín Farrera Gómez, Neftalí Pérez Flores, Raúl Rodríguez Ontiveros, Rosalinda Ovando Corzo, Daniel González Vázquez, Arturo Velasco Martínez, Oscar Mendoza Narcía, Neín Farrera Vázquez, Carlos Tovilla Barragán, manifiestan su decisión también de renunciar a los cargos que aún ostentan.
Explican que renuncian a su militancia política partidaria, pero no su convicción ideológica de seguir luchando desde otras trincheras, por la construcción de un mejor país, con mayor igualdad, mayor democracia y mayor participación de la ciudadanía, en donde reine el respeto a las divergencias, se deseche la intolerancia y la corrupción y se priorice el legítimo interés del pueblo, en pocas palabras la “construcción en nuestro país de un auténtico poder popular”.
Quienes renuncian dijeron ser los iniciadores de este proyecto partidario que encabezaron con responsabilidad, convicción y lealtad, el liderazgo colectivo de nuestro partido; logrando resultados electorales, organizativos, políticos e ideológicos y la conquista de espacios políticos de representación, tanto en el Congreso del Estado, como, Alcaldías y Regidurías en los Ayuntamientos.
Se lograron avances importantes en municipios como Tuxtla Gutiérrez, Tapachula, San Cristóbal, Comitán, Palenque, Simojovel, Cintalapa, Jiquipilas, Yajalón, Tila, Tonalá, Arriaga, Huixtla, Motozintla, Amatenango de la Frontera, Chalchihuitan, Duraznal, Tumbalá, Suchiate, Bellavista, Chicomuselo, Concordía, Villaflores, Ostuacan, Pichucalco, Bochil, El Bosque, entre otros; incluso, ganar en dos periodos consecutivos la Diputación Local de mayoría por el Distrito de Yajalón, y una Diputación Federal de mayoría por el Distrito de Motozintla.
“Lo que no sabes Alberto, es que el equipo que llevo a la derrota al Movimiento Magisterial fue el que por su incorrecta política de alianzas con los dirigentes nacionales del SNTE, llevaron a la derrota a la posición del PT en el movimiento magisterial”, sostienen.
Admiten que se equivocaron al permitir que estos personajes encontraran refugio en el seno de nuestro partido, del cual paulatinamente se fueron haciendo de la dirección, hasta desplazarnos de manera deshonesta, desleal y traidora, desarrollando prácticas alejadas totalmente de nuestros documentos básicos, convirtiendo al partido en coto de poder personal y faccioso, rotándose entre ellos las posiciones políticas y manejando la prerrogativas del partido con la mayor discrecionalidad y opacidad que haría sonrosar a las peores camarillas, pues nunca rindieron, ni han rendido cuenta alguna.
Lamentablemente contaron con la complacencia, apoyo y respaldo de la Dirigencia Nacional, y lamentamos también con tristeza y decepción que estas prácticas ya hayan permeado a toda la estructura nacional del partido, sumándose a la crisis de credibilidad y legitimidad por la que atraviesa la clase política en lo general y el sistema de partidos políticos en particular, finalizaron.