TAPACHULA, Chiapas, 09 de Marzo de 2014. /Noticias/Tribuna Chiapas.-La mujer policía tapachulteca, María del Carmen Escobar, abandonó este fin de semana, el hospital en el que se encontraba hospitalizada, para recuperarse de la golpiza que le propinó el controvertido Dirigente estatal del Partido “ORGULLO” Chiapas (POCH), Víctor Moguel Sánchez,
Precisamente este 8 de marzo cuando se celebra el día internacional de la mujer, este delito continúa impune y por el cual los familiares de la víctima, cuyo único delito fue cumplir con su deber, piden justicia y un castigo ejemplar para Víctor Moguel quien también cobra como Regidor de Tapachula.
En pleno siglo XXI cuando las autoridades y los organismos defensores de los derechos humanos se han pronunciado e impulsado la Equidad de Género y el respeto pleno a los derechos de la mujer, hay personajes que maltratan sin piedad al mal llamado sexo débil.
Prueba de ello es la historia de María del Carmen, una mujer policía con cuatro meses de embarazo, quien tuvo la mala fortuna de encargarse del portón de acceso a la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, aquel viernes 28 de febrero, lugar en el que Víctor Moguel arremetió contra su humanidad.
El protocolo de seguridad marca que todas las personas deben identificarse para acceder a las instalaciones, en esa ocasión Víctor Moguel alias el (Chico Che) quiso meterse a la fuerza y bajo los efectos de un enervante y la desesperación de rescatar de la cárcel a un amigo suyo identificado como Rodrigo Peña Anza, empujó el portón sin importarle derribar a la oficial de la policía local.
De inmediato la mujer policía fue enviada al hospital para su recuperación y la de su bebé, donde su estado de salud se diagnosticó como grave, sin embargo este fin de semana, después de recuperarse de las lesiones abandonó el nosocomio, sin que hasta el momento se haya actuado en contra del agresor.
María del Carmen y sus familiares hoy temen por su seguridad, ya que conocen la calaña de este sujeto que se dice muy influyente, quien ha demostrado su agresividad y el instinto impulsivo con que actúa, lo cual significa un riesgo para la sociedad.
Pero la Mujer Policía y sus familiares no están solos, ya que diferentes organizaciones sociales y políticas, incluida la propia militancia del POCH, en esta ciudad, han mostrado su repudio e indignación ante esta barbarie cometida por el dirigente estatal del POCH y sobre todo han exigido que se aplique la ley en contra de este político y funcionario que dice ser muy influyente/Noticias/Tribuna Chiapas