CIUDAD DE MÉXICO, 18 de mayo de 2016.- Durante esta semana, un grupo de líderes de la CNTE ha mantenido una actitud beligerante y opuesta a los esfuerzos por mejorar la educación de las niñas y niños, ha impedido el funcionamiento normal de diversas escuelas afectando así el derecho fundamental de esos niños a recibir una educación de calidad y lastimando gravemente la confianza depositada en ellos por los padres de familia.
Quienes han suspendido ilegalmente clases y presionado a otros a paralizar escuelas, en algunos casos con métodos violentos, son una minoría que no defiende los legítimos derechos y aspiraciones del magisterio.
Lo que esos líderes defienden es, más bien, regresar al sistema de privilegios ilegales, indebidos e injustos, del que se beneficiaron por largo tiempo, cuando la venta de plazas, la manipulación del escalafón o la extorsión para ubicarte en una escuela u otra era lo normal. No debemos regresar a esas prácticas.
Por ello, queremos hacer un sincero llamado a los maestros a volver a las aulas mañana mismo. Los docentes son la columna vertebral de una escuela y su lugar está con las niñas y niños.
Afortunadamente, la abrumadora mayoría de los maestros, demostrando un gran valor y vocación por sus alumnos, en esta ocasión han ignorado el llamado de esos líderes. Por ello, desde el lunes 17, miles de maestros se han reintegrado a trabajar a sus escuelas, asegurando con ello su empleo.
Éste es un momento muy importante para todos los maestros. No tiene sentido alguno incurrir en la posibilidad de ser despedido ni poner en riesgo su plaza y su empleo, del que depende su sostenimiento y el de su familia.
Es la oportunidad de demostrar que los genuinos maestros de Chiapas, Guerrero, Michoacán y Oaxaca son los que se distinguen por el esfuerzo, la dedicación y el compromiso con sus escuelas y con sus alumnos.