MEXICO, D. F., 06 de Agosto de 2015.- El Banco de México (BdeM) subastó ayer un total 400 millones de dólares durante la jornada cambiaria, en un intento por disminuir la depreciación de la moneda mexicana, pero sin conseguir su objetivo. Este ha sido el mayor monto de divisas subastado desde el 3 de febrero de 2009, es decir, de los últimos seis años y medio, cuando el banco central colocó 800 millones de dólares en una sesión en la que la moneda mexicana retrocedió 1.61 por ciento.
A las 9 de la mañana, poco después de iniciadas las operaciones en el mercado local de cambios, el Banco de México sacó a la venta 100 millones de dólares, una vez que el peso alcanzó una depreciación de 1.25 por ciento frente al dólar Fix, dentro del mecanismo de subasta con precio fijo que permite subastar 200 millones de dólares cuando el precio de esa modalidad de dólar aumenta más de uno por ciento sobre el cierre de la víspera, de acuerdo con lo dispuesto por la gubernamental Comisión de Cambios el pasado 30 de julio.
Los 100 millones de dólares fueron asignados a un solo postor a un precio de 16.3353 pesos, sin que hiciera mella en el mercado para frenar la especulación contra el peso.
Poco después empezó la subasta diaria de 200 millones de dólares sin límite de precio, que fueron asignados a 10 postores a un precio en promedio ponderado de 16.3668 pesos, que tuvo un máximo de 16.3710 y un mínimo de 16.3645 pesos.
La presión sobre la moneda mexicana prosiguió, por lo que a las 12 horas el banco central realizó la segunda subasta de 100 millones de dólares con límite de precio, que fueron asignados a nueve postores a un precio ponderado de 16.3633 pesos. Pero la demanda por la divisa estadunidense superó a la oferta, el peso continuó su depreciación y el dólar se vendía en las operaciones de menudeo en las ventanillas bancarias a 16.65 pesos.
Gabriella Siller, directora de análisis económico de Banco Base, resumió así la presión sobre la moneda mexicana: Durante la sesión se subastaron un total de 400 millones de dólares, mientras el total demandado fue de 830 millones de dólares en conjunto, es decir, más del doble.
Al cierre de la jornada los bancos vendían el dólar a 16.70 pesos, ocho centavos arriba de la víspera, mientras el dólar Fix aumentó en casi 20 centavos su precio y el interbancario elevó su cotización 11 centavos para quedar en 16.3740 pesos y colocar nuevamente a la moneda nacional en su mínimo nivel en 22 años. El peso mexicano, apuntó Siller, cerró la sesión como la segunda divisa más depreciada en la canasta de principales cruces frente al dólar.
Entre tanto, las monedas latinoamericanas cayeron el miércoles frente al dólar ante la expectativa de un alza de las tasas de interés en Estados Unidos en septiembre, luego de que un sólido dato del sector servicios contrarrestó las débiles cifras del mercado laboral en la principal economía del mundo.
El real brasileño se devaluó 0.72 por ciento y llegó a 3.50 unidades por dólar por primera vez en 12 años; el peso chileno se depreció 0.59 por ciento, con lo que llegó a su nivel más bajo desde 2008 y su paridad alcanzó los 682.5 pesos por dólar, mientras el peso colombiano perdió 0.92 por ciento y terminó a 2.951 pesos por divisa estadunidense; el peso uruguayo se mantuvo estable 28.43 unidades por dólar, y el argentino se depreció 0.05 por ciento, a 9 mil 205 pesos.