MEXICO, D.F., 15 de Diciembre de 2013.- Una canasta de 28 productos básicos –entre éstos leche, aceite, atún, pan, arroz, frijol, sal y azúcar–, se vende hasta 108 pesos más cara que hace un año, lo que implica un encarecimiento de 14 por ciento desde diciembre de 2012 a igual mes de 2013, de acuerdo con los monitoreos de precios en supermercados del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
El incremento de 14 por ciento en dichos productos, registrado en el listado que el Inegi publica mensualmente sobre el mercado alimentario, cuadriplica la inflación general de 3.21 por ciento acumulada de diciembre de 2012 hasta noviembre pasado.
En general, la mayoría de esos 28 alimentos y bebidas industrializadas se venden ahora entre uno y cinco pesos más cara que cuando comenzó el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
Así, por ejemplo, el litro de aceite Capullo subió de 31.36 a 34.95 pesos; la lata de atún en aceite Nair de 9.7 a 11 pesos; la lata de 220 gramos de rajas de chiles jalapeños La Costeña de 6.49 a 8.25; el kilo de frijol negro Verde Valle de 25.59 a 27.60; el kilo de harina de maíz Maseca de 11.50 hasta 14.50; el kilo de sal Elefante de 8.27 a un máximo de 10 pesos y el paquete de 680 gramos de pan blanco Bimbo se encareció de 24.05 hasta 29 pesos.
Hay productos que subieron entre 10 o 20 pesos como el kilo de jamón americano de pavo y cerdo Kir, que hace un año se vendía a 66.86 pesos pero en esta semana llegó a 79.90 pesos como precio máximo, es decir 13 pesos de diferencia o un alza de 19 por ciento anual.
También la caja de 850 gramos de galletas Marías de la marca Gamesa subió de 29.05 hasta 39.90 pesos, casi 10 pesos más o 34 por ciento y la lata de 400 gramos de Chocomilk pasó de 35.66 a 46 pesos, un aumento de 10.34 pesos o 29 por ciento.
El mayor aumento corresponde al frasco de 100 gramos de Nescafé, que se incrementó de 40.75 hasta 61 pesos, lo que implica 20 pesos de diferencia o un alza anual de 49.69 por ciento.
El Inegi también incluye en su listado un six pack de cerveza Corona y una Coca-Cola de 2.5 litros, que subieron de 61 a 67 pesos y de 20.76 a 23 pesos, respectivamente.
Las cifras oficiales muestran además que la canasta con los mismos 28 productos, tanto en cantidad como en presentación y marca, puede venderse hasta 220 pesos más cara de un supermercado a otro, lo que representa una diferencia de 33 por ciento. Profeco consigna que los precios más baratos se encuentran en Bodega Aurrerá y Walmart, incluso Comercial Mexicana y Chedrahui, según el producto y la zona, mientras que Sumesa muestra los precios más caros.
Además, los habitantes del Distrito Federal y los municipios conurbados pueden llegar a pagar de 30 a 80 pesos más que los de Monterrey y Oaxaca, respectivamente, por la misma canasta.
Aún así, en la ciudad de México se registra tanto la cotización más barata como la más cara de los 28 productos, ya que oscila de 660 a 880 pesos. La disparidad no es tan marcada en Monterrey y mucho menos en Oaxaca, donde la diferencia es de 104 y 73 pesos, respectivamente, o bien de sólo 14 y 10 por ciento entre la canasta más cara y la más barata.
También hay diferencias entre sucursales de una misma cadena, según revelan los monitoreos que aplica constantemente Profeco en supermercados de 25 ciudades y que muestra a los consumidores en su página de Internet bajo la herramienta “Quién es quién en los precios”, de los cuales este diario sólo seleccionó las tres ciudades mencionadas.