MEXICO, D.F., 16 de Enero de 2015.- Durante la puesta en marcha del Programa Nacional de Apoyo a la Adquisición de Tractores, el presidente Peña Nieto precisó que este programa será un respaldo para que la gente del campo se haga de un tractor y esto apoye a la mecanización del campo y eleve nuestra productividad en el agro
Con una inversión de mil 750 millones de pesos, el gobierno federal apoyará la compra de 11 mil 600 tractores. El presidente Enrique Peña Nieto definió esta acción para mecanizar el agro nacional, como emblema o símbolo de modernidad, apoyo a la producción y de compromiso con los campesinos.
De acuerdo con el mandatario, los productores recibirán un subsidio de alrededor de 159 mil pesos, equivalentes en muchos casos a la mitad del precio de cada tractor.
En un acto en esta población productivamente rica y limítrofe con Querétaro, y más tarde en Pachuca, donde en otra ceremonia entregó cobertores como parte de un programa para atenuar los efectos de las bajas temperaturas, el presidente Peña insistió en dar ya como evidentes, diversos beneficios derivados de las reformas estructurales.
Específicamente para el campo y, en general, para los mexicanos insistió en el fin de los gazolinazos que –aceptó– tanto impactaban a las familias mexicanas. Asimismo, mencionó la disminución por primera vez en la historia de nuestro país de las tarifas de electricidad, la suspensión a los incrementos mensuales en los precios de diésel y gas lp, el otorgamiento de mayor crédito y a menores tasas de interés a los productores agrícolas y el desarrollo de programas como el de comercialización y desarrollo de mercados, para asegurar precios justos a los productores.
En la relación incluyó la suspensión de los cobros de larga distancia y la determinación –vía la reforma energética– de producir, en breve, fertilizantes nitrogenados.
Estos beneficios que vienen de las reformas, de las políticas que estamos dirigiendo al campo en nuestro país, están mostrando ya resultados, señaló.
Peña Nieto citó entonces cifras del Instituto Nacional de Geografía y Estadístca (Inegi) según las cuales, hasta septiembre de 2014 el campo creció 3.9 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior. Además, las exportaciones se incrementaron en 9.9 por ciento y evidencian que la actividad agropecuaria está en gran dinamismo y creciendo.
Después derivó hacia los recientes reportes sobre el empleo. Diciembre, dijo, registró la tasa de desocupación más baja de los pasados siete años. Fue de 3.76 por ciento.
Habló entonces de la creación de 714 mil puestos formales de trabajo y auguró una cifra aún mayor para este año.
El presidente Peña se trasladó entonces a Pachuca, donde pese a haber entrado ya al país más de la mitad de los frentes fríos anunciados para este año, puso en marcha –por iniciativa de la Coordinación Nacional de Protección Civil– un programa de entrega de apoyos a la población de escasos recursos.
Éste se desplegará en 18 estados. Entre otras acciones se contempla la entrega de 500 mil cobertores a igual número de personas –varios fueron depositados por el mandatario en manos de algunos beneficiarios de diversas poblaciones hidalguenses–, así como despensas y colchonetas.
Además, ahí mismo el mandatario fue testigo de la firma de un convenio para construir diversas obras de infraestructura en localidades indígenas, como introducción de agua potable, electrificación y caminos.
En la ceremonia y frente al señalamiento de Andrés San Agustín Castro, indígena otomí, de que el gobierno federal ha sido objeto de muchas críticas, Peña Nieto admitió: nuestro país ha pasado por momentos adversos.
Pero, señaló, en este 2015 se espera tener mayor crecimiento de la economía, se generarán mayores empleos y ello significará más dinero para las familias, así como reducción de costos.
Esto debe ser bueno para México, para la economía de las familias y, en consecuencia, estaremos trabajando y alcanzando el objetivo fundamental para el que trabaja este gobierno, que es generar bienestar a la población.